top of page

4 útiles hábitos para trabajar con Mindfulness



Como fundadora de Soy Único hace cinco años, puedo asegurar que el emprendimiento proporciona altas dosis de estrés cuando el negocio se estanca, o el volumen de tareas inacabadas se acumulan sin piedad en la bandeja de entrada.

Pero después de formar estos años a cientos de personas en el ámbito empresarial, puedo asegurar que el estrés es patrimonio de todos.


El Mindfulness me ha ayudado siempre a mantener mi salud mental y emocional en buen estado y así lograr mis propósitos profesionales y vitales. Pero es necesario convertir la práctica en hábitos.

Puedo recordar momentos pico de estrés en los que dejé de practicar, como cuando decidí dejar el trabajo fijo y emprender. Y aunque no parecía un problema en este momento, mi falta de práctica conmigo misma finalmente me trajo problemas. Me estresé. Me volví menos consciente de mí misma. Mis relaciones se vieron afectadas. Y no fue hasta que comencé a volver a mis hábitos diarios que me di cuenta de cuánto me había desviado.


Es necesario convertir la práctica en hábitos

Tanto si eres emprendedor y estás lanzando una start up, tienes un trabajo muy estresante o buscas empleo, si eres alguien que busca tener éxito en su carrera profesional, aquí tienes los 4 hábitos de atención plena que uso para mantenerme firme y enfocada a diario.


1. Me levanto 10 minutos antes.

Este es primer ejercicio diario que se ha convertido en una parte fundamental de mi rutina diaria.

Cada mañana, tan pronto como me despierto y me aseo, me siento 10 minutos a preparar mi mente para el día que tengo por delante . El teléfono móvil no lo toco. No reviso el correo electrónico (ni siguiera rápidamente, porque nunca lo es). No abro Linkedin ni Facebook. No leo las noticias. Simplemente me siento en silencio y practico atención plena mientras la ciudad despierta. Observo el ruido mental de fondo mientras me hago consciente de las sensaciones que llegan través de mis sentidos.

2. Cuando como, solo como

A la hora de comer apago todo durante al menos 15 minutos. Me doy un descanso.

No te engañes : tu lista de tareas pendientes nunca estará completa. La bandeja de entrada nunca llegará a cero. El mundo está constantemente vibrando, tienes que ser tú quien decida cual será es momento tranquilo y lo hagas posible

La productividad requiere descansos. Entonces, ¡hazlo!.

3. Escucho plenamente cuando me hablan

Para trabajar de forma efectiva, hagas lo que hagas, debes "mantener el espacio" para todos los demás. Durante el día la gente llega con preguntas, preocupaciones y marrones. Necesitan sentirse escuchados, vistos, valorados y apreciados.

Puede ser agotador, pero siempre me recuerdo lo importante que es estar presente en las conversaciones, mirar a los ojos y comprender lo que esa persona necesita y siente, sin olvidar hacer eso mismo conmigo.

4. Cuando llego a casa estoy disponible para mi familia

Tuve un tiempo que solo trabajaba, o bien delante de mi portátil o mientras conducía, caminaba o conversaba mi cabeza seguía tomando decisiones. El estrés se disparaba y contagiaba mi inquietud e irritación a los que me rodeaban, como mi pareja y mis hijos

Ahora cuando introduzco la llave en la puerta de mi casa, me detengo un instante, respiro profundamente y pongo atención plena en cómo me siento. Eso me da el espacio necesario para gestionarme y elegir qué necesito y cómo quiero relacionarme con los demás


Entrena hábitos sanos con la práctica de atención plena y observa el cambio.

Cuéntamelo en info@soyunicoempresas.com


1 visualización0 comentarios

Entradas Recientes

Ver todo
bottom of page